Las mascotas forman parte de los hogares de millones de familias alrededor del mundo. Son seres especiales e importantes y por ende, ante su partida, es normal atravesar por un proceso de duelo.

Cuando una mascota fallece, una de las preguntas más importantes es cómo debe ser tratado su cuerpo. Funeravet se creó en el año 2001 para solucionar esa incógnita.  Esta empresa funeraria dedicada a las mascotas inició en Colombia, cuando sus dueños vieron que las clínicas veterinarias y hogares en general no hicieran una buena disposición de los cuerpos de las mascotas.

De hecho, en el país neogranadino existen cementerios con lápidas personalizadas, velatorios para perros, hámsters e incluso gallinas. La oferta postmortem para mascotas es un servicio necesario en una sociedad que entiende que las mascotas son héroes de la familia.

Servicio digno para mascotas

Los dueños, devastados por el duelo, pueden abrazarse mientras su amigo es llevado en andas para su último adiós. En esta empresa atienden entre 28 y 35 servicios diarios. Aunque la mayoría prefiere la cremación colectiva, que es lo más económico.

En Colombia existen cementerios para mascotas.

Algunas personas comentan con pena que el primer perro que tuvieron en la familia acabó en el río. Mientras hoy después de ver el ataúd de cartón ser enterrado comentan que pueden estar tranquilos.

En la actualidad, más o menos de cada 100 familias, 70 tienen mascotas. Todas ellas consideradas un familiar más dentro del hogar. El veterinario Francisco Moreno, Director de Funeravet, comenta que por eso surgió la empresa. “Necesidad de un servicio funerario digno en las mismas condiciones y con la misma humanidad que un servicio para las personas”, concluyó el veterinario.

Psicólogos explican que esto no es por la necesidad de humanizar a un animal, sino que después de tantos años se lo merecen. Todo miembro de la familia se merece un adiós a la altura de todo el amor que ofreció durante su vida.

Salas velatorias para mascotas

En una de las sedes de Bogotá de Capillas La Fe, una de las principales funerarias de Colombia, están realizando dos velatorios. Familias entran y salen del edificio principal donde velan a abuelos, tíos o amigos. Mientras en un anexo más pequeños yacen los cuerpos de Tony y Martina en dos ataúdes.

Hombre acompaña los restos de su perra en una sala de velación de mascotas en Bogotá.

Ya sea en velatorios como el de Martina o servicios más discretos como los de cremación, en esta funeraria atienden unos 1300 servicios mensuales de animales. Incluso han realizado servicios para hámsters, cuyes o gallinas.

Perder una mascota es equivalente a perder a un miembro de la familia y durante ese momento tan desgarrador. Busca la mejor opción que te permitan tener cerca a tu amada mascota para siempre.