El Gran Premio de México se convirtió en el escenario de un emocionante cambio de mando en la Fórmula 1. El piloto británico Lando Norris (McLaren) se llevó una victoria dominante, la décima de su carrera y la sexta de la temporada, para catapultarse de nuevo al liderato del Campeonato Mundial de Pilotos.

Norris, que partió desde la pole position, ejecutó una carrera prácticamente perfecta en el Autódromo Hermanos Rodríguez, cruzando la meta con una ventaja significativa y demostrando el excelente estado de forma de su McLaren. Esta victoria le permite romper una racha sin triunfos de casi tres meses y reafirma su candidatura al título en la recta final de la temporada.

El podio lo completaron Charles Leclerc (Ferrari), quien terminó en una sólida segunda posición, resistiendo la presión final, y Max Verstappen (Red Bull), que se hizo con el tercer escalón después de una gran remontada. El neerlandés, que se vio afectado por un Virtual Safety Car al final, no pudo dar caza a Leclerc, pero logró un resultado crucial para seguir en la lucha.

Batalla Apretada por el Liderato

Con este resultado, Lando Norris asciende a la cima de la clasificación general con 357 puntos, tomando una mínima ventaja de solo un punto sobre su compañero de equipo, el australiano Oscar Piastri (356 puntos), quien finalizó la carrera en la quinta posición.

Max Verstappen, a pesar de no ganar, sigue muy metido en la pelea, ubicándose en el tercer lugar del mundial con 321 puntos, a 36 unidades de Norris. La lucha por el campeonato se vuelve más intensa y se decidirá en las cuatro carreras largas y dos pruebas sprint que restan en el calendario.

La Sorpresa y los Abandonos

La nota positiva, además de la victoria de Norris, la dio el británico Oliver Bearman (Haas), quien logró un impresionante cuarto lugar, el mejor resultado de su corta carrera en la F1.

Por otro lado, la carrera estuvo marcada por los abandonos de pilotos importantes como el español Fernando Alonso (Aston Martin) y su compatriota Carlos Sainz (Williams) por problemas técnicos.

El Gran Premio de Brasil será la próxima parada, donde Verstappen buscará aprovechar su historial en Interlagos para recortar distancias en un campeonato que está más abierto que nunca.