En una época donde las pantallas dominan la comunicación, en el corazón del estado Lara florece una celebración que reivindica el poder de la palabra hablada: el Festival Internacional de la Oralidad. Este evento, organizado por la Unión de Narradores Orales Escénicos de Venezuela (UNOES), se ha convertido en un punto de encuentro entre la tradición, la creatividad y el arte de contar historias.
Un festival con historia y propósito
Desde su fundación hace más de tres décadas, la UNOES ha trabajado incansablemente para posicionar la narración oral escénica como una disciplina artística reconocida.
El festival nació en Barquisimeto, ciudad conocida por su riqueza cultural, y hoy es un referente latinoamericano en el arte de contar historias.
A lo largo de los años, ha reunido a narradores, cuenteros y artistas de Venezuela, Cuba, México, Colombia, España y Francia, quienes comparten leyendas, anécdotas, mitos y relatos populares en plazas, teatros, escuelas y comunidades.
El evento busca algo más que entretener: preservar la memoria oral del pueblo venezolano, esa que se transmite entre generaciones, y que forma parte esencial de nuestra identidad cultural.

Una fiesta de la palabra con acento internacional
El Festival Internacional de la Oralidad no se limita a la escena local. Cada edición recibe invitados de distintos países, generando un intercambio cultural que enriquece la experiencia tanto de los narradores como del público.
En la edición XXXII (2025), el lema fue “La mujer tiene la palabra”, y reunió a más de 40 narradoras de Venezuela, Colombia, México y Francia, quienes ofrecieron espectáculos en espacios públicos y centros culturales de Barquisimeto.
Actividades que conectan con el público
Lo que hace especial a este festival es su carácter participativo y comunitario.
Las actividades no solo ocurren en auditorios, sino también en calles, parques, plazas y escuelas. Algunos de los espacios habituales incluyen la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL), el Teatro Juárez y plazas emblemáticas de Barquisimeto.
Entre las actividades más destacadas se encuentran:
- Presentaciones de narradores orales escénicos nacionales e internacionales.
- Talleres de formación para nuevos cuenteros.
- Encuentros con comunidades escolares.
- Espectáculos que combinan teatro, música y danza con la narración.
Cada historia narrada rescata fragmentos de la identidad venezolana: la vida rural, los personajes populares, las leyendas urbanas y las tradiciones que aún sobreviven en los rincones del país.

Un espacio para soñar y preservar la memoria
Para muchos asistentes, el Festival Internacional de la Oralidad es mucho más que un evento cultural: es un viaje emocional al pasado, una celebración de la memoria colectiva.
Según el Ministerio del Poder Popular para la Cultura, la oralidad “constituye un patrimonio inmaterial que transmite valores, historia y tradiciones”.
Por eso, festivales como este no solo entretienen, sino que salvan historias del olvido, fortaleciendo el tejido cultural y educativo de Venezuela.
Barquisimeto, reconocida ya como “la ciudad cuentera del país”, continúa siendo el epicentro de esta gran fiesta que demuestra que, mientras haya alguien dispuesto a escuchar, la palabra nunca morirá.
Lo que viene para 2026
Los organizadores de UNOES ya preparan la próxima edición, que promete nuevos invitados internacionales y una agenda más amplia de actividades formativas.
Si te apasiona la narración, la cultura o el teatro, este festival es una oportunidad única para conectar con historias, voces y experiencias que trascienden el tiempo.
“Cada palabra contada es una semilla que germina en la memoria de quien la escucha.”
El Festival Internacional de la Oralidad nos recuerda que el poder de la voz sigue siendo uno de los actos más humanos y transformadores.