Para la mayoría de las personas, entrenar a un perro comienza y termina con comandos y equipo. Nunca piensan que desarrollar una relación con su perro a través del entrenamiento sea posible, y mucho menos crítico.

Para tener un buen entrenamiento y crear una buena relación con su mascota, se necesita tener una buena comunicación con la mascota, para crear un vinculo fuerte.

Cachorro. Objetivo de la relación: Seguir al líder

La mayoría de los dueños de mascotas se enamoran del encanto de un cachorro, así que, en lugar de convertirse en su compañero de entrenamiento, se convierten más en sus agentes, defendiendo el comportamiento de su joven canino.

Permitir al comportamiento lo llevará a tener dificultades para cambiar en el futuro y también hará que se pierda una etapa de desarrollo en la vida de un perro.

Hay que aprovechar el deseo natural de un cachorro de seguir y aprender, y enséñale juegos divertidos basados en el control de sus impulsos.  El objetivo de la relación que buscas a esta edad es enseñarle a tu cachorro que todo lo que quiere tiene que pasar por ti, lo que te hace tan valioso como la recompensa.

Adolescencia: Consistencia

Esta etapa tendrá muchos “¿Por qué?” y respuestas de “No quiero” de su perro. Al igual que un adolescente humano, a los perros en esta etapa les gusta probar los límites y ver qué pueden hacer. Mantenerse firme en las reglas de la casa y apegarse a la rutina ayudará a su perro a darse cuenta de que el desafío no le hace ningún bien.

Sea consistente con su perro adolescente. Aprenderá que tus ordenes no cambian en expectativas y su mascota sera consistente en sus respuestas.

Adulto: Objetivo de relación: expandir y fortalecer su vínculo

Una vez que tu perro es adulto, el entrenamiento y los juegos que lo acompañan no se detienen. De hecho, esta es la edad en la que más enseñas a tu perro, y más fuerte se vuelve su relación.

A través de actividades basadas en el entrenamiento, no solo crecerá su relación, sino que su perro también obtendrá el ejercicio físico y mental que lo ayudará a ser feliz, saludable y fuerte.

Algunas de las muchas lecciones enseñando un buen entrenamiento de perros,  durante muchas décadas incluyen la amistad, amor, lealtad, gratitud, paciencia y humildad; todas se construyen a través de una relación sólida.

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